Cómo empezar con buen pie el 2025 – En resumen
Después de las vacaciones de Navidad, es fundamental fomentar un sentido de equipo en toda la empresa. Esto ayuda a reenfocarse en los objetivos principales y a comprender mejor cómo los roles individuales contribuyen a los logros de la organización.
Animaos a organizar eventos de team building o encuentros sociales simples para mejorar el ánimo y ofrecer algo agradable que esperar durante el largo mes de enero.
Si trabajáis en un espacio compartido, aseguraos de que sea acogedor, ya que el entorno influye significativamente en el estado de ánimo y la motivación de los empleados, especialmente en los meses de invierno.
Las decoraciones ya se han quitado, los restos de turrón se han terminado (¡por suerte!) y las bandejas de entrada están a reventar… Así es, ha comenzado un nuevo año y todos intentamos retomar el ritmo laboral.
Por supuesto, siempre hay quien vuelve a la rutina con entusiasmo, pero para la mayoría, la primera semana de trabajo tras la Navidad es… bueno, un poco deprimente.
Cómo empezar con buen pie el 2025
Hace frío, llueve y parece que todo el mundo tiene un resfriado. No es de extrañar que la primera semana tras las fiestas sea lenta y desmotivadora.
Si vuestro equipo está atravesando una “depresión post-festiva”, ¿qué podéis hacer como profesionales de Recursos Humanos para difundir positividad, recargar energías y reenfocaros en los retos del año?
Aquí tenéis algunas ideas para ayudaros a vosotros y a vuestra empresa a empezar con fuerza este 2025.
Reevaluar las prioridades personales y empresariales
Las vacaciones son una oportunidad fantástica para relajarse y desconectar del trabajo. Sin embargo, al regresar, solemos olvidar cuáles eran nuestras tareas pendientes.
Es fácil perder las primeras semanas de enero respondiendo correos triviales o haciendo tareas «fáciles», pero poco importantes.
Reunid a vuestro equipo (ya sea presencial o virtualmente) durante los primeros días y revisad tanto las prioridades personales como las estratégicas. Ayudadles a centrarse en lo que realmente importa e incentivad a los managers a hacer lo mismo.
Organizar una reunión informal al inicio del año es una buena ocasión para compartir los objetivos empresariales y reforzar los lazos entre compañeros.
Ofrecer algo que esperar con ilusión
Enero puede ser un mes muy largo. ¿Por qué no planear actividades o pequeños “regalos” para dar a los empleados algo agradable que esperar?
Para revitalizar el equipo o integrar a nuevos empleados, podéis organizar actividades de team building. No tienen que ser retos exigentes al aire libre (¿quién quiere eso en enero?). Cocinar juntos, asistir a un taller de música o colaborar en un proyecto interdepartamental pueden ser igual de efectivos para fomentar el espíritu de equipo.
Si el tiempo o el presupuesto no lo permiten, al menos reservad un almuerzo de equipo o una salida por la tarde. Incluso un evento social sencillo puede crear una atmósfera positiva y ofrecer una oportunidad para socializar fuera del entorno habitual.
Prestar atención al entorno
Observad vuestro lugar de trabajo. ¿Es acogedor o más bien gris y sombrío? El entorno influye mucho en el estado de ánimo y la percepción del trabajo.
No hace falta repintar la oficina o llenarla de decoraciones llamativas. Con pequeños cambios, como añadir plantas, cuadros, flores o mejorar la iluminación, se puede elevar el ánimo y hacer que el entorno sea más acogedor.
Resaltar lo positivo
En invierno, es fácil caer en ciclos de negatividad. Para combatirlo, buscad formas de destacar los aspectos positivos del 2025. Celebrad nuevas contrataciones, logros alcanzados o éxitos destacados. Incluso una pausa con café y pasteles puede ser efectiva.
En las reuniones de equipo, invitad a todos a compartir algo positivo que les haya ocurrido en la semana. Puede ser un agradecimiento de otro departamento, el reconocimiento por un buen trabajo o una conversación constructiva con un cliente. Este enfoque ayudará a mantener una atmósfera positiva.
Fomentar el bienestar
El inicio del año es un momento en el que muchas personas se enfocan en su salud. Esto también beneficia a las empresas, que obtienen equipos más sanos y energéticos.
Incentivad el bienestar organizando grupos para caminar, actividades deportivas o charlas con expertos en nutrición y fitness. Incluso ofrecer fruta fresca en la oficina puede ser un gesto pequeño con gran impacto.
Pequeños pasos como estos pueden marcar una gran diferencia, reduciendo el absentismo y promoviendo una plantilla más saludable y motivada.
