¡Enhorabuena! Acabas de dar el siguiente gran paso en tu carrera profesional y te has convertido en un profesional de RR.HH.
Convertirse en un profesional de RR.HH. es una forma magnífica de influir positivamente en la vida de las personas y fomentar entornos de trabajo positivos. Te encuentras en el centro de la cultura de tu empresa, creando un entorno del que la gente se siente orgullosa de formar parte y ayudando a los empleados a prosperar.
Tu nuevo puesto también te permitirá contribuir a la toma de decisiones estratégicas clave de tu empresa, e influir en el entorno directivo. Al mismo tiempo, aprenderás y deberás adaptarte constantemente a los nuevos retos del dinámico mundo laboral. Es un puesto muy variado y satisfactorio.
Sin embargo, RR.HH. puede resultar un poco abrumador a veces, sobre todo si eres nuevo en tu puesto. Si te has incorporado a una nueva empresa o incluso acabas de empezar en RR.HH., puede que estés sentado leyendo esto y pensando: «¿Por dónde empiezo?». Y es una buena pregunta.
Las 10 cosas que todo nuevo profesional de RR.HH. debería hacer en un nuevo puesto
Adaptarse a cualquier nuevo puesto lleva su tiempo, y como nuevo profesional de RR.HH., no es diferente. Puede que tengas grandes iniciativas o ideas que quieras poner en práctica de inmediato; sin embargo, el comienzo de tu nuevo trabajo debe ser un momento en el que reflexiones sobre tus experiencias pasadas, escuches a los que te rodean y aprendas todo lo que puedas sobre tu nueva empresa.
Comprender la dinámica propia de tu organización será clave para alcanzar el éxito. Teniendo esto en cuenta, hay 10 cosas que te recomiendo que hagas como nuevo profesional de RR.HH. para tener las máximas posibilidades de éxito. Son las siguientes:
1. Comprende de verdad la cultura de la empresa
Tómate tu tiempo para conocer los valores, la cultura y la historia de la empresa. Comprender su cultura implica profundizar en las normas, actitudes y comportamientos compartidos en toda la organización.
Con los conocimientos que obtengas, comprenderás mejor qué motiva a los empleados de la empresa, cómo trabajan en equipo y el ambiente de trabajo en general. Profundizar en la historia de la empresa también proporciona información vital sobre su evolución, hitos y acontecimientos significativos, todo lo cual puede arrojar luz sobre su estado actual y dirección futura.
En conjunto, estos aspectos te ayudarán a fundamentar tu propio proceso de toma de decisiones. Esto te permitirá alinear las nuevas políticas, programas e iniciativas con el espíritu de la empresa, fomentando un lugar de trabajo más cohesionado y cooperativo.
2. Fomenta las relaciones y el entendimiento
Ser un profesional de RR.HH. significa que tienes que tener una especie de superpoder para tratar con las personas. En última instancia, necesitarás que todo el mundo en la empresa -especialmente los que ocupan puestos clave en la toma de decisiones- esté de acuerdo con tus iniciativas para que sean aceptadas. Por tanto, intenta ponerte en contacto con las principales partes interesadas, los jefes de departamento y los miembros del equipo lo antes posible.
Establecer una buena relación y comprender sus necesidades durante los primeros días y semanas te ayudará a diseñar estrategias de RR.HH. eficaces a largo plazo.
3. Revisa las políticas y procesos existentes
Familiarízate con las políticas, los procedimientos y los requerimientos de RR.HH. existentes. Esto incluye conocer todos los procedimientos clave de RR.HH. de la empresa, incluidos los relativos a la contratación, la gestión del desempeño, las medidas disciplinarias, los planes de compensación y mucho más.
Cuando conozcas bien las políticas y los procedimientos vigentes, estarás en mejores condiciones de evaluar lo que es necesario actualizar o mejorar. La identificación de áreas de actualización o mejora podría ir desde la simplificación de procesos engorrosos hasta la mejora de las iniciativas de diversidad e inclusión, pasando por la resolución de carencias en los programas de bienestar de los empleados o el perfeccionamiento de los programas de gestión del desempeño.
Este enfoque proactivo garantiza que las políticas y procedimientos de RRHH de tu empresa sigan siendo ágiles, adaptables y que apoyen tanto las necesidades de los empleados como los objetivos de la organización.
4. Evalúa las prácticas de RR.HH.
Al igual que sus políticas y procedimientos, evalúa las prácticas actuales de RR.HH. para identificar los puntos fuertes y las áreas de mejora. Crear una cultura de excelencia en RR.HH. debería ser el objetivo final de cualquier profesional de RR.HH., pero no podrás conseguirlo si te ves obstaculizado por procesos anticuados o sin digitalizar.
Por lo tanto, considera la posibilidad de llevar a cabo una encuesta o un taller para recabar la opinión de tus empleados sobre lo que funciona y lo que no en tu departamento de RRHH.
5. Establece objetivos tangibles y realistas
El éxito de tus actividades se basará probablemente en diferentes objetivos fundamentales. Entre ellos estarán:
- Tus esfuerzos para apoyar a la empresa atrayendo y reteniendo a los mejores talentos,
- Cómo fomentas una cultura de compromiso y satisfacción,
- Impulsar iniciativas de formación y desarrollo,
- Ayudar a los responsables directos a gestionar eficazmente el desempeño en el lugar de trabajo,
- Garantizar el cumplimiento y la eficacia de los procesos de RR.HH.,
- Promover la diversidad, la equidad y la inclusión,
- Gestionar eficazmente los costes departamentales y reducir los gastos,
- y manejar con habilidad las relaciones con los empleados y la resolución de conflictos.
Con todo esto en mente, sé proactivo a la hora de trabajar con la dirección de la empresa para alinear tus propias metas con los objetivos principales de la empresa. Así podrás desarrollar un plan cuantificable en el que se esbocen los objetivos a corto y largo plazo de tus iniciativas de RRHH.
6. Establece canales de comunicación
La creación de canales de comunicación abiertos con el departamento de RR.HH. permite a los empleados expresar sus preocupaciones, buscar orientación y proporcionar información de forma cómoda y coherente, todo ello vital para la cultura de excelencia de RR.HH. mencionada anteriormente.
Las encuestas de clima incluidas en cualquier software de RR.HH., por ejemplo, ofrecen una plataforma confidencial para que los empleados compartan sus opiniones de forma anónima, fomentando la participación de aquellos que podrían dudar en hablar abiertamente. Además, las plataformas digitales como los foros de empleados o los portales de RR.HH., proporcionan un espacio accesible y en tiempo real para los debates, la colaboración y el envío de comentarios.
Esta variedad de canales se adapta a las distintas preferencias de comunicación, garantizando la inclusión y la accesibilidad de todos los empleados, lo que ayuda a fomentar una cultura de transparencia, confianza y participación activa dentro de la organización.
7. Investiga la formación y el desarrollo
Al analizar las carencias de competencias y las aspiraciones profesionales dentro de las organizaciones, los buenos responsables de RR.HH. pueden pasar a diseñar programas de desarrollo personalizados que satisfagan tanto las necesidades de los empleados, como los objetivos de la organización.
Estos programas, como talleres, mentoring o quizás formación más especializada o formal, capacitan a los individuos a la vez que fomentan una plantilla cualificada. Esta doble inversión en el crecimiento personal y la preparación de la organización cultivará una cultura de aprendizaje continuo que beneficiará tanto a los empleados como al éxito de la empresa a largo plazo.
8. Vuelve a familiarizarte con los asuntos legales
Puede que estés familiarizado con muchas de las regulaciones de RR.HH., pero no está de más repasar tus conocimientos. Con esto en mente, dedica algo de tiempo durante las primeras semanas a comprobar que tus prácticas de RR.HH. cumplen los requisitos legales y las normas del sector. Y no olvides mantenerte al día sobre las leyes y normativas laborales pertinentes para evitar problemas de cumplimiento.
9. Abraza la tecnología de RR.HH.
Si tu empresa todavía no utiliza un software de RR.HH. específico, estás en el lugar perfecto para cambiar esta situación. Al aprovechar el potencial de un software de RR.HH., podrás agilizar los procesos, gestionar los datos de forma eficaz y mejorar la experiencia general de los empleados. Para saber por qué todos los equipos de RR.HH. deberían adoptar una transformación digital de RR.HH., sigue este enlace.
10. Busca la mejora continua
Por último, intenta evaluar continuamente las estrategias y los procesos de RR.HH. de tu empresa. Busca la opinión de los empleados y las partes interesadas y mantente abierto a realizar ajustes para mejorar la función de RR.HH. Al hacer esto, te asegurarás de que tus estrategias de RR.HH. siguen siendo dinámicas y responden a las necesidades cambiantes tanto de los empleados como de la organización.
Aceptar el feedback y realizar los ajustes necesarios fomenta una función de RR.HH. ágil que se mantiene relevante, eficiente y alineada con los objetivos de la empresa. Este compromiso con la mejora continua no sólo mejora la satisfacción y el compromiso de los empleados, sino que también posiciona a RR.HH. -y, lo que es más importante, a uno mismo- como un socio empresarial clave para impulsar el éxito general de la empresa.