La motivación y la satisfacción laboral de los empleados es ahora tan importante como siempre. Puesto que las organizaciones necesitan seguir manteniendo su operativa de la mejor manera posible en este escenario de trabajo en remoto, deben tomar las medidas necesarias para:
- garantizar el compromiso de su plantilla con la empresa
- facilitar su alineación con los valores y la cultura corporativa
- mantener su motivación intacta para el desempeño óptimo de sus roles.
Pero, la situación que nos rodea no ha puesto las cosas fáciles. Y es posible que tus empleados empiecen a sentir, en algún momento, que no están completamente alineados con el espíritu o la filosofía de la empresa. O con sus modelos de trabajo o el estilo de gestión. Esto puede pasar en cualquier momento, tanto si trabajamos en remoto, como si no. Pero, claro, cuando los equipos están deslocalizados, no siempre resulta fácil identificar esas señales de alerta. Señales que podrían estar indicando una posible “desconexión” de la fuerza laboral. Los siguientes cinco consejos pueden ser muy útiles para ayudarte a reconectar con tu equipo. Y para mantener los niveles de compromiso óptimos. Pero, además, te dejo estas otras cuantas ideas para que el trabajo remoto solo sea un elemento más de la suma. Es decir que aporte ventajas y no inconvenientes.
Reforzar la visión
Cuando se trabaja en remoto puede resultar demasiado sencillo que los equipos se desconecten de los objetivos. Es decir, que pierdan el foco de lo que están tratando de conseguir y la razón por la que están operando en remoto. Es, obviamente, una situación inesperada, sobrevenida y, en muchos casos, implementada con carácter de urgencia. Por lo que no ha habido ocasión de explicar con claridad las razones y los objetivos.
Ahora bien, pasados los primeros momentos y, en plena etapa de desescalada, RRHH debe respaldar no solo al negocio. También y, más importante aún, a las personas que lo conforman. Enviar mensajes de forma regular sobre la situación corporativa. Explicar porqué se toman determinadas decisiones que afectan a los modelos de trabajo -digamos- convencionales. Recordar a las personas la importancia de su trabajo. Todas estas son algunas acciones que pueden ser interesantes. Si las personas entienden el impacto de su trabajo en el resto de la organización, seguro que se sentirán mucho más “conectadas”. No solo con sus tareas, sino con el objetivo corporativo común.
Contactar regularmente con las personas
La sensación de aislamiento y soledad causada por el distanciamiento social solo empeora por la ausencia de interacciones cotidianas experimentadas en el trabajo. Esto puede desmotivar a algunos y causar una caída en su energía y entusiasmo por el trabajo. RRHH puede impulsar iniciativas para alentar a los colegas ‘remotos’ a ponerse al día. Iniciativas que apunten, tanto a los equipos como a nivel individual, uno a uno. Y. de esta manera ver cómo van todos y mantener la interacción social.
Mantener a todos informados e involucrados
Cuando se trata de comunicación, el contenido es tan importante como la frecuencia. Anima a los managers a encontrar más oportunidades para involucrar a sus equipos en los procesos de toma de decisiones. Con equipos dispersos, puede ser un desafío para las personas tener una idea clara de lo que está sucediendo en la organización, en general. Esto dificulta que las personas se sientan entusiasmadas con su trabajo, siendo únicamente un receptor pasivo de instrucciones. Las personas que han estado involucradas en discusiones sobre la dirección estratégica de su equipo y su trabajo tienen más probabilidades de sentirse implicadas. Y más motivadas para alcanzar el éxito. Utilizar un software de recursos humanos puede ayudar a mantener el hilo de comunicación y conexión que tanto necesitan empleados y empleadores en estos momentos.
Ayudar mantener el vínculo
¿Realmente la gente de tus equipos se conoce bien? Cuando se forman los equipos por primera vez, es probable que los responsables de recursos humanos y los managers se hayan esforzado por ayudar a las personas a establecer vínculos. Pero es importante mantener esta cohesión a largo plazo. Incluso, también de manera más informal. Esto puede parecer un poco difícil de hacer de forma remota. Pero no es imposible.
RRHH puede tomar la iniciativa y animar también a los managers a organizar eventos sociales. Un aperitivo online o desafíos de equipo para una competición amistosa pueden ayudar a impulsar el compromiso. Por ejemplo, ‘¿Quién puede cultivar el girasol más alto?’. Estos desafíos recuerdan a la empresa que también hay espacio y tiempo para divertirnos juntos. Y que eso puede ser justo lo que los equipos necesitan para volver a comprometerse.
Visibilizar la progresión
Es posible que el desarrollo profesional de los empleados no sea ahora tan importante en la lista de prioridades de tu empresa. Está claro que hay que manejar antes la presión que genera la COVID-19. Pero el reconocimiento y el aprendizaje continuo son críticos para las personas que trabajan durante un período tan estresante. Sentir que están paralizados y no ser reconocidos, incluso después de trabajar muy duro, puede hacer que la gente piense ‘¿qué sentido tiene todo esto?’ Y, así, acaben desconectándose.
Incluso si las promociones y los aumentos salariales no están disponibles actualmente, el progreso de los empleados aún debe ser reconocido. Y deben ser conscientes de lo valiosas que son sus contribuciones para la empresa. Esto puede conseguirse dotándoles de una mayor autonomía o responsabilidad en los proyectos que abordan. Y, por supuesto, compartiendo sus logros en boletines de noticias internos. O invirtiendo en su formación y desarrollo.
Por último, recuerda que lo que impacta sobre el compromiso difiere para cada individuo. Las conversaciones abiertas con tu equipo son esenciales para verificar que todos tengan lo que necesitan para mantenerse comprometidos en el trabajo.
https://cezannehr.com/es/l/tecnologia-de-gestion-de-personas/
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Cristina Del Amo
Soy periodista, empresaria, emprendedora y madre. Licenciada en Ciencias de la Información por la Univ. Complutense de Madrid y Máster en Gestión Comercial y Marketing, por la Escuela de Negocios ESIC, mi trayectoria profesional está ligada al entorno de la comunicación, la gestión empresarial y los recursos humanos.
